| El jugador nacido en Basavilbaso habló de su presente. Recibió ayer a los colegas de Ovación, del diario Uno, en la concentración de San Lorenzo en Paraná antes del partido frente a Colón. Se lo notaba tranquilo, quizás el gol ante Gimnasia de Jujuy en la primera fecha le haya servido como bálsamo para atenuar la tensa relación con el hincha de San Lorenzo. Lo acontecido en el pasado Apertura -con la histórica goleada sufrida ante Boca incluida- no es fácil de olvidar para el entrerriano Osmar Ferreyra.
Al brindar las causas de su permanencia en el Azulgrana el Malevo dijo: “Más que nada porque vino un entrenador (Ramón Díaz) que me quería, que hizo mucho esfuerzo para que yo esté en San Lorenzo; tanto él como el presidente. En lo personal quiero tomarme una revancha por todo lo vivido el año pasado, debemos tratar de revertir la situación porque no fue lindo lo que nos tocó experimentar. Esta es una oportunidad nueva para demostrarle a la gente que por algo me quedé, y más allá de que las cosas no hayan salido tan bien, uno siempre defendió los colores a muerte”.
Consultado por la reacción de los hinchas tras la humillante goleada de Boca, sostuvo: “Es entendible que sucedan estas cosas, más en la Argentina. Es el único país donde ocurren este tipo de sucesos vinculados al fútbol. Esperábamos una respuesta, no sé si de esa magnitud, pero se aguardaba algo de parte de la gente. Fue justo contra mí; cometí el error de hacer un gesto erróneo contra la platea”, confió.
Según recuerda el natural de Basavilbaso, en ese momento mostró su fastidio “porque haber perdido 7-1 con Boca fue lo peor que me pudo haber pasado en mi carrera. Fue por la bronca, la impotencia, que todo el mundo te grite y se te vienen muchas cosas a la cabeza. Uno dejó todo adentro y fue un partido de otro planeta, porque no puede suceder algo así en un clásico de Primera División”, entendió. De esa manera se ganó el odio del hincha Cuervo, que le recriminaba su paso por River. “En la semana me buscaron a mí directamente. Acá cualquier barra tiene acceso a los jugadores”, comentó.
De los objetivos a perseguir en el Clausura que se inició con una victoria, el jugador de 24 años contó que tiene contrato hasta 2009 con el CSKA ruso, aunque a lo último prefirió inclinarse por una continuidad en el Ciclón. “Ahora estoy bien, contento, arrancamos de la mejor manera. Tuvimos una buena actuación en el debut y me tocó hacer un gol. Voy a tratar de devolver todo lo que en su momento ellos hicieron para que me quede y rendir al máximo en la cancha. Tenemos la obligación de pelear arriba porque somos un equipo grande y ojalá podamos seguir en la misma senda”, finalizó.
[b]LA FAMILIA[/b]
El enfrentamiento entre barras y jugadores caló hondo en el ánimo del entrerriano, tanto que afectó su entorno familiar. “Cuando pasan este tipo de cosas, uno dice ‘¿para que estoy acá, para que vine?’. Desde ese momento mi familia no fue más a la cancha, pero les prohibí que asistan porque es feo que a uno lo estén puteando desde la platea y tenés que aguantarte todo eso. Uno no está preparado para estas cosas”.
Fuente: Marcelo Comas / Ovación.
