El “Malevo” seria convocado para la Selección Mayor

“La verdad es que no me puedo quejar; tuve unas vacaciones bárbaras. Hace tiempo que no la pasaba tan bien en las vacaciones y tan largas como fueron”, comento distendido Osmar Ferreyara sentado en una sillón de la abuela “Cata” a la espera del ultimo asado con la familia y amigos antes de partir a Buenos Aires, escala previa a su viaje a Roma donde con su equipo el CSKA de Moscú realizara una larga pretemporada. El futbolista reconoció que en Rusia “todo muy complicado”, donde le costó muchísimo todo, más que nada adaptase al fútbol. “En la vida cotidiana me fue mas fácil por la ayuda de todos mis compañeros argentinos que están allá, de mi novia, de familiares que han ido; pero en el fútbol la verdad que es muy complicado, muy diferente a lo nuestro”, asegura el “Malevo”. “El único lugar que hay tantas vacaciones es en este. Fijate que los jugadores que vinieron de Europa, estuvieron nada mas que una semana; vinieron a pasar el 24, el 25 acá y después tuvieron que volver. Por ese lado estoy contento, pero me encontré con un fútbol totalmente diferente al nuestro y manejado de diferente forma. Ni bien llegué, jugué los primeros tres partidos y tuve algunos problemas con el técnico, que era otro, distinto, al que me había pedido y por lo tanto no me conocía y pretendía que jugara en posiciones que no siento, hasta que finalmente lo hable y le transmití que prefería esperar y por eso no tuve continuidad y me la tuve que bancar; así fue durante todo el año hasta que ese técnico se fue” comento. El futbolista nacido en Basavilbaso dijo luego que su suerte empezó a cambiar cuando volvió al club el técnico que había pedido su incorporación y con el se abrió la posibilidad de jugar y “en cuatro partidos hice dos goles”, pero la felicidad no fue total volvió a ir al banco y perdió la tan anhelada continuidad. “La verdad no se como explicarlo, no hay manera de decirlo, si discriminación o que; quizá porque soy de otro país y prefieren poner un jugador de ellos, un ruso que se muestre; pero la verdad que no entiendo cual es el manejo porque pagan fortunas por jugadores argentinos y no nos hacen jugar, es una cosa de locos. Y eso nos pasó a todos, con Fernando Cavennaghi por ejemplo, fue la máxima figura que llegó allá, fue una revolución terrible; creo que lo pagaron 12 millones de Euros y creo que jugó en dos meses siete partidos, y de titular en dos; y llegó como máxima figura”, dice y se toma la cabellera una y otra vez en busca de una respuesta que por ahora no puede encontrar. Ferreyara destaca su crecimiento como persona el trato con sus colegas argentinos con quieres hizo gran amistad y asegura: “somos una gran familia”, por lo único que le molestaría dejar Moscú. “Yo tenía la opción de venir a River y mi decisión fue “no” porque lo considere no conveniente porque los rusos me daban a préstamo cuatro meses y querían que en enero esté en la pretemporada con ellos y no me servia para nada porque yo volvía a River y no tenia el puesto asegurado, lo tenia que pelear con buenos jugadores como hay en River; y en cuatro meses no sabía si podía hacerlo. Obviamente yo confío en mis condiciones, pero nadie me aseguraba de que juegue; y cuatro meses es muy poco hasta que me vuelva a adaptar acá en Argentina, el tema del horario y esas cosas que es complicado, así que tomé la decisión de quedarme allá, seguir peleándola, jugar y demostrar que por algo me compraron y que soy un buen jugador...ese seria mi primer objetivo y obviamente la selección, el sueño que de siempre y que este año espero se me pueda dar, ojalá que José confíe en mi y me pueda dar una oportunidad”, exclama. Su rostro vuelve iluminarse cuando surge lo de la selección y comenta que el “Profe” lo llamo y tuvo una charla larga, como hacia muchísimo que no tenia, y esto, reconoce, lo puso muy contento. “Por todo lo que viví en el 2004, por todo lo que pasé, por todo lo que sufrí, toda la lucha constante que tuve que tener ese llamado del “Profe” me hizo muy feliz y para colmo José (Pekerman) también me llamó y me pidió que por favor pase por el predio de Ezeiza antes de porque quería verme”, se confiesa antes de dejar su Basavilbaso natal. Horas después Ferreyra tenia la charla con el entrenador de la Selección mayor, José Pekerman, quien le habría manifestado sus intenciones de contar con sus servicios para los partidos que disputara con México en Estados Unidos y con Bolivia por las eliminatorias sudamericanas en el venidero mes de marzo, para lo cual espera que los dueños del pase permitan que viaje al país para hacer la preparación que quiere el entrenador, que seria de 20 días. Cono era lógico llego el momento de la despedida y con las expectativas de lo surgido en la charla con el entrenador -de mas de una hora- el deportista partió rumbo a europa entre las lagrimas de sus familiares que lo fueron a despedir.