| El seleccionado argentino igualó 0 a 0 por la tercera fecha del hexagonal final que otorga cuatro plazas para el Mundial de Canadá y dos para los Juegos Olímpicos. Cahais fue expulsado y no jugará el próximo encuentro ante Colombia.
El seleccionado argentino Sub 20 de fútbol mantuvo el invicto en el hexagonal final del Sudamericano que se desarrolla en Paraguay, tras igualar ayer contra Chile sin goles en un partido de la tercera fecha jugado en el estadio Defensores del Chaco, de Asunción.
El equipo albiceleste terminó el encuentro con diez jugadores por la expulsión del capitán Matías Cahais, a los 45 minutos del segundo tiempo.
De esta manera, Argentina y Chile totalizan cinco unidades y se mantienen en los puestos de vanguardia.
El primer tiempo tuvo un desarrollo mediocre, ya que ninguno de los dos equipos logró imponer su juego. En esto tuvo mucho que ver los más de 40 grados que debieron soportar los 22 jugadores durante todo el partido.
Argentina jugó con un sistema táctico 4-4-2, con Matías Sánchez como lateral derecho, Pablo Mouche como volante por la izquierda y con Maximiliano Moralez e Ismael Sosa en el ataque.
El conjunto de Hugo Tocalli empezó mejor que Chile a partir de lo que generó Ever Banega, pero con el transcurrir de los minutos el partido se emparejó. Es que Arturo Vidal le hizo marca personal a Banega, lo anuló y Argentina quedó "quebrado", ya que el volante de Boca Juniors es el generador de fútbol y el que maneja la pelota y el ritmo del equipo.
Además Alexis Sánchez, el cerebro futbolístico de Chile, empezó a tener incidencia en el desarrollo del encuentro y se asoció con Mathías Vidangossy y Nicolás Medina.
De hecho, a los 12 minutos Vidangossy, con un remate desde larga distancia, hizo lucir a Sergio Romero.
Pero luego de diez minutos de dominio chileno, que jugó con un 3-1-3-1-2, Argentina volvió a tomar el control del partido, ya que los dos marcadores centrales, Federico Fazio y Cahais anularon a Vidangossy y Medina, y Claudio Yacob, el mejor jugador de la cancha en la etapa inicial, recuperó muchísimas pelotas e impuso presencia.
Sin embargo, Argentina no tuvo juego, porque no anduvieron bien con la pelota Lautaro Acosta, Banega y Moralez (estos dos últimos perdieron balones en la mitad de la cancha y generaron peligrosos contraataques que el equipo chileno no logró aprovechar), y tampoco pesó en ataque la dupla Mouche-Sosa.
Pese a eso, a los 20 minutos, un cabezazo de Sosa, tras un tiro libre desde la derecha Mouche, exigió una estupenda respuesta de Cristopher Toselli.
Justamente, el juego aéreo fue una de las armas elegidas por Argentina para llegar al gol. Es que Chile mostró falencias por arriba.
El comienzo del segundo tiempo fue distinto al primero, ya que el equipo de José Sulantay tuvo dos chances claras en los pies de Medina y Vidangossy, ésta última la más clara, tras un perfecto contraataque comandado por Alexis Sánchez.
Además, Chile se adelantó diez metros en el campo de juego, se adueñó de la pelota y manejó el desarrollo del partido. Tocalli, frente a esta situación, mandó a la cancha a Angel Di María en lugar de Mouche a los 13 minutos y sobre los 19m. a Alejandro Gómez por Banega, quien se retiró con un golpe en el tobillo izquierdo.
Pero el equipo no mejoró en lo inmediato. Igualmente Chile no fue un absoluto dominador y tampoco generó situaciones de gol.
La última media hora de juego tuvo alternativas cambiantes y el saldo negativo fue la expulsión de Cahais, quien no podrá jugar el próximo jueves contra Colombia a las 19.50.
Argentina, sin embargo, dispuso de dos situaciones claras de gol a los 39 y a los 41 minutos, pero el centro desde la derecha de Acosta no pudo ser conectado por Abán en la primera y en la segunda el remate de Di María se fue cerca del palo izquierdo de Toselli.
Sobre el final el equipo de Tocalli sufrió un par de embates chilenos, terminó apretado por la expulsión de Cahais, pero consiguió un punto valioso. El calor jugó su partido, pero fue para los dos.
El sueño de llegar al mundial de Canadá 2007 y a los Juegos Olímpicos de Beijing 2008 sigue abierto. Sólo faltan dos pasos: Colombia y Uruguay. Argentina está en carrera. Argentina sueña y cree. Y tiene razones y fundamentos para hacerlo.
Fuente: Télam.