Portugal y Costa de Marfil ofrecieron un pobre espectáculo en el primer tiempo, en el que sólo se destacó un derechazo de Ronaldo que pegó en el palo derecho del arquero africano.
En todo momento ambos equipos esperaron más de lo que atacaron, aunque fueron los africanos quienes intentaron ser un poco más incisivos.
Si el primer tiempo había sido flojo, el segundo fue aún peor.
Tanto Portugal como Costa de Marfil comparten el grupo con poderoso Brasil y el débil Corea del Norte y sabían que una derrota en este partido hubiese complicado la clasificación.
Por ese motivo, el miedo fue el principal protagonista y pese a que los africanos siempre fueron más incisivos, no consiguieron desnivelar ni siquiera con el ingreso de su máxima figura Didier Drogba.
Fútbol: Télam.