| Un futbolista basavilbasense, ex Ramsar Juniors, que jugó varias temporadas en las inferiores de Unión de Santa Fe, tiene destino europeo. Se trata de Damián “Palanca” Núñez que desvinculado del club santafesino viaja este lunes a Eslovaquia para tratar de cerrar su incorporación al MSK Zilina.
Damián Núñez, considerado uno de los delanteros con más proyección del club Unión, lo que consiguió a fuerza de muy buenos rendimientos y goles, no se puso de acuerdo con la dirigencia de la institución “tatengue”, golpeada en lo deportivo por el descenso y con dificultades políticas y económicas, y esta semana de desvinculó.
“Palanca”, que soñaba poder llegar a la Primera del club que le dio la oportunidad cuando salió de Ramsar, se lamenta:“no pudo ser”, y reconoce haber encontrado en Santa Fe “buena gente”, compañeros que llevará en el corazón y un “hermano”, como calificó Gastón Petrucci con quien compartió cuatro años y a quien le agradece especialmente toda la ayuda que le ofreció. “Gastón me envió un mensaje de despedida que me conmovió...hasta las lágrimas”, nos comentó.
Núñez asegura sentir “una mezcla de sensaciones”, mientras por un lado se ilusiona con lo que pueda ser su experiencia europea por otro lado se lamenta tener que dejar “personas muy importantes”, como lo son sus padres, sus amigos y la gente que conoció en Unión. Inmediatamente recuerda la recientemente finalizada etapa en Santa Fe a la que llegó “solo, sin conocer a nadie” y hoy “con satisfacción puedo decir que me traigo (y se señala el corazón) hermanos del alma a los que les estoy y estaré muy agradecidos”.
Núñez, que reconoce que cuando retiró sus pertenencias del club sintió “gran tristeza, me “pegó” muy mal...vine (a Basavilbaso) descompuesto con una mezcla de sensaciones y nervios”, se prepara para vivir un fin de semana que será inolvidable. “Voy a estar con mis viejos que hace tiempo no veo, con mis amigos...y claro voy a festejar mi “cumple”, los 21 años (los cumple el sábado) y claro también me volveré a despedir”, sintetiza entre risas.
“El domingo viajo a Ezeiza, tengo un compromiso antes de viajar. El lunes, a las 2 de la tarde, viajo a Europa. Tendré 13 horas hasta Madrid, después 3 horas a Viena y un par de horas más hasta Eslovaquia (país miembro de la Unión Europea (desde el año 2004). Limita al norte con Polonia, al este con Ucrania, estado extracomunitario, al sur con Hungría, al oeste con Austria y al noroeste con República Checa)”, precisa.
En diálogo con RIEL FM, compartiendo unos mates con sus padres, el joven futbolista admite que siempre soñó con la posibilidad de mostrar su fútbol en Europa, pero que “no esperaba esta chance ahora. Me llega como regalo de cumpleaños”, dice. Enseguida aclara: “hay cuestiones que arreglar con el MSK Zilina”, pero confía que su representante lo hará, aunque si no ocurre “hay un plan “B”, otra posibilidad -también en el viejo continente- pero de la que prefiero no dar detalles”, dijo.
Núñez considera que lo que le está pasando es una “revancha” que le da el fútbol por las dificultades que debió afrontar el año pasado, que por una fractura en una vertebra (la quinta lumbar) no pudo jugar por ocho meses. “Me la pasé tirado en una cama”, recuerda admitiendo que hasta llegó a pensar en “colgar los botines”, pero felizmente “todo aquello quedó atrás, ya entreno y juego con normalidad”.
El MSK Zilina es el club de la ciudad de Zilina, la quinta más grande, al noroeste de Eslovaquia. “El club -por lo que me dijo la gente del grupo Gestión y Deportes de Daniel Lisera y mi representante Pedro Navarrete- milita en la Primera División, es muy organizado, tiene una economía muy sólida y juega la Liga de Campeones de la UEFA. Creo que el único latino que jugó hasta la temporada pasada fue el peruano Jean Carlos Francisco Deza Sánchez”, acota.
