Copa América: Paraguay será rival de Uruguay en la final
FÚTBOL | En un partido realmente muy malo, Paraguay se impuso a Venezuela en los penales y se transformó en el rival de Uruguay en la final de la Copa América del próximo domingo.
La "Vinotinto" hizo más méritos y pudo haber obtenido la victoria en el tiempo reglamentario y en el suplementario, pero la "Alborroja", con un juego mucho más mezquino, alcanzó la final… ¡empatando todos los encuentros que disputó en el certamen!
El combinado guaraní comenzó un poco mejor que su par venezolano.
Sin embargo, lo suyo era muy forzado y le costaba poner en aprietos a Renny Vega.
La mejor opción para los comandados por el "Tata" Martino llegó a los 8´, cuando, tras un corner del sector derecho, Verón se elevó solo en el área de la "Vinotinto" y cabeceó, pero su disparo fue desviado por el "1" venezolano.
Ambos equipos intentaban ejercer presión y apostaban a la velocidad, haciendo de la mitad de cancha una zona de paso. Claro, mucha velocidad, poco fútbol. Haedo Valdez se escapó a los 25´ e, ingresando al área, sacó un disparo que Vega, atento, mandó al corner.
Segunda y última carga paraguaya en la primera mitad, porque los de César Farías se adueñaron de la pelota en los últimos 15´ y se acercaron al gol en más de una ocasión.
Primero se lo anularon a Oswaldo Vizcarrondo a los 35´ por offside de Rondón y luego, a los 43´, se produjo una doble incidencia que mereció terminar en gol. Moreno, de cabeza, la mandó al travesaño tras un centro desde la derecha y, posteriormente, Justo Villar se agigantó para taparle el rebote a Rondón.
Paraguay arrancó mejor, pero se desinfló rápido. Venezuela repuntó sobre el final y dejó una leve mejor impresión. Eso sí, de fútbol mejor ni hablar.
El segundo tiempo fue realmente muy malo. El seleccionado guaraní quiso un poquito al principio, los venezolanos intentaron una leve reacción. No pasó nada de nada. Aburrimiento total. Sin ideas, sin emociones, sin fútbol… Poco, poquito y nada. El alargue era inevitable. Y llegó nomás.
Las cosas cambiaron en el suplementario, pero todo a favor de Venezuela, que se fue con todo arriba y mereció el gol ampliamente.
Es que, entre otras llegadas de peligro, mandó una pelota al palo ("Miku" Fedor) y otra al travesaño (Juan Arango, tiro libre).
Paraguay, que se quedó con uno menos por la expulsión de Jonathan Santana cuando finalizaba el primer chico, apenas se defendió y apostó decididamente a los penales.
En la fatídica tanda, Paraguay se mostró más preciso (Villar le tapó a Lucena) y se quedó con el partido.
Uruguay ya tiene rival para la final de este próximo domingo. A puro empate, es Paraguay.