FÚTBOL | En Santa Fe, el local cayó por 2 a 1 ante el equipo de Cagna, que se recuperó de dos derrotas consecutivas. Román Martínez, luego expulsado, y Damián Leyes, hicieron los goles del visitante. Darío Gandín, de tiro penal, anotó para el dueño de casa. Con este resultado, se complicó la situación del director técnico del "sabalero".
Tigre cortó este sábado una racha de dos derrotas consecutivas al superar como visitante por 2-1 a Colón de Santa Fe, que quedó muy comprometido con el descenso, en un partido válido por la cuarta fecha del torneo Clausura de Primera División.
Los goles de Tigre, que hacía seis partidos que no ganaba de visitante, fueron convertidos por Román Martínez a los 39 minutos del primer tiempo y Damián Leyes a los 35m. del segundo, mientras que Darío Gandín, de penal, logró la igualdad transitoria para Colón a los 10m. del complemento.
Con este resultado, Tigre, que logró su primer triunfo ante Colón en Santa Fe, llegó a los seis puntos por lo que sigue prendido en la lucha por el título y por ingresar a las copas internacionales. Los locales quedaron con tres unidades y muy comprometidos con el descenso, ya que están apenas un punto por encima de la promoción.
Tigre sacó provecho del mal momento de su rival y si bien sus delanteros siguen sin amigarse con el gol encontró en un volante y un defensor debutante las armas para llegar a la red y llevarse una victoria meritoria, ya que sacó la ventaja definitiva con 10 jugadores luego de la expulsión de Román Martínez a los 30 minutos del segundo tiempo.
En cambio, Colón, que venía de ser goleado por Lanús por 5-1, nuevamente pagó su falta de ideas para concretar las acciones que genera y con esta nueva derrota su entrenador Leonardo Astrada quedó en la cuerda floja y se retiró insultado por el público.
La primera etapa estuvo claramente dividida en dos partes, ya que hasta la mitad fue Tigre el que dispuso de las mejores opciones pero evidenció la falta de suerte de sus delanteros, y luego Colón tomó las riendas del juego aunque también dejó escapar algunas ocaciones claras, por lo que fue injusto que el visitante culminara arriba por un gol.
Es que Tigre pudo haber abierto el marcador con un cabezazo de Pablo Fontanello, un mano a mano de Sebastián Ereros, un tiro libre de Leyes o un disparo alto de Leonel Altobelli ya sin arquero.
Pero el local contestó con un remate del venezolano César González, un anticipo de arriba de Martín Cardetti o un rebote mal aprovechado por Marcelo Goux.
Sin embargo, Tigre fue el que encontró la apertura del marcador tras una jugada iniciada por Martínez, quien recuperó en la mitad de la cancha, abrió para Matías Giménez y se metió en el área para desviar él mismo el centro y descolocar al arquero Sebastián Blázquez.
Colón acusó el golpe y pudo haber igualado de no ser porque le anularon un gol a Gandín por posición adelantada, pero en el entretiempo parece que surtieron efecto las palabras del cuestionado Astrada, ya que los locales salieron a jugar con otra mentalidad el complemento.
Luego de varias llegadas claras, el local consiguió la igualdad aunque beneficiado por un error del árbitro Rafael Furchi, quien cobró un penal inexistente contra Gandín, que él mismo transformó en gol rematando al palo izquierdo de Daniel Islas, quien fue para el otro lado.
El conjunto santafesino siguió dominando y si bien parecía que se le simplificaban las cosas con la expulsión por doble amarilla de Martínez a los 30 minutos, todo le salió a la inversa ya que en una de las pocas llegadas, Tigre consiguió el gol de Leyes al aprovechar un un rebote desde un ángulo prácticamente imposible.
Colón, con más amor propio que fútbol, acorraló al visitante contra su arco y pudo haber alcanzado la igualdad con un cabezazo de Juan José Morales o un penal no cobrado a Claudio Enría, pero no lo consiguió y se retiró silbado por su público, al mismo tiempo que Tigre festejaba el triunfo con los cerca de 3.000 hinchas que llegaron a Santa Fe.
Fuente: Télam.