COLÓN DERROTÓ A BOCA EN SANTA FE

En el Cementerio de los Elefantes, prevaleció la lucha por encima del juego. Boca fue más ambicioso, con la obligación de conseguir los tres puntos para mantenerse solitariamente en la punta del campeonato. Colón fue bastante menos incisivo, pero en algunos pasajes pudo arrimar peligro. Hasta los 20 minutos, el encuentro podría resumirse en un largo y enorme bostezo. Ninguno de los dos equipos siquiera se había acercado con cierta presunción de riesgo contra el área rival. Sin embargo, las mejores intenciones fueron de los visitantes, que impusieron su dinámica en el mediocampo y controlaron más tiempo la pelota. Pero los dirigidos por Miguel Russo fallaron en el instante de la definición. A los 22 minutos, Dátolo erró un cabezazo sólo, dentro del área y con el arquero desparramado por el piso, luego de una gran jugada de Palacio. Fue la más clara chance de los ‘xeneizes’. Por el lado de Colón, Grisales -el encargado de generar juego en el equipo- fue bien absorbido por la marca de los volantes boquenses: Ledesma, Banega o Battaglia. Pero después de la primera media hora, pudo encontrarse con sus compañeros. Allí llegaron las situaciones de riesgo. A los 31 minutos, una gran combinación entre Grisales, Gandín y Quinteros terminó con una defectuosa definición del delantero ‘sabalero’. A los 37 minutos, Gandín ganó dentro del área y le metió un “puntinazo” a la pelota, que sorprendió a todos los defensores visitantes, pero no así al arquero Caranta, quien desvió con una atajada espectacular, con un manotazo, al córner. En el segundo tiempo, el desarrollo parecía repetirse invariablemente. Hasta que hubo un punto de inflexión en el partido: a los 7 minutos, el juvenil Urribarri le cometió una fuerte infracción a Gandín y fue expulsado, por doble amonestación. El técnico Russo inmediatamente quiso recomponer su defensa y sacó del campo de juego a Dátolo, quien había cumplido una buena labor en el período inicial. La bronca ‘xeneize’ contra el árbitro Beligoy se incrementó a los 15 minutos, cuando evitó sancionar un penal de Rivarola sobre Palacio. Entonces, se despertó Colón, que metió un disparo en el travesaño, a los 20 minutos, y luego desperdició una clara chance en los pies de Grisales, a los 22’. El conjunto de Astrada dejó pasar sin pena ni gloria sus “veinte minutos de fama” y sobre los 28’ el encuentro volvió a emparejarse, debido a la expulsión de Garcé -también por doble amonestación- luego de una falta sobre el movedizo Palacio. Boca se fue con todo al ataque, pero su búsqueda no halló los resultados esperados. En tiempo de descuento, un disparo de Álvaro González provocó estupor entre los hinchas locales. La pelota tenía destino de gol, pero salió apenas al lado del palo derecho. El triunfo había estado tan cerca... Pero el fútbol es imprevisible: en la jugada siguiente, Grisales tomó la pelota fuera del área y sacó un derechazo impresionante, que se clavó en el ángulo derecho del arco defendido por Caranta. Inesperadamente, Colón festejó los tres puntos y puso el campeonato más caliente que nunca. Fuente: Télam.