COPA LIBERTADORES | Los colombianos vencieron 3-1 al equipo de Russo. Pablo Ledesma marcó el tanto que puso a los xeneizes en ventaja, pero Blas Pérez, en dos oportunidades, y Rubén Bustos, revirtieron el resultado. El jueves que viene se vuelven a ver las caras en Buenos Aires.
Boca perdió, jugó muy mal el segundo tiempo y por eso se vuelve a Buenos Aires con las manos vacías, pero sabiendo que en el desquite, por el gol marcado en condición de visitante, si gana 2-0 llegará a la final de la Copa Libertadores, donde espera el ganado de Gremio, que en el partido de ida, jugado en Porto Alegre, venció 2-0 a Santos, ambos de Brasil.
Encima, además de jugar mal, el paso de Boca por Colombia deja otro punto negativo, por la lesión sufrida por el arquero Mauricio Caranta, quien tuvo que dejar la cancha en el entretiempo por una fuerte distensión, que podría ser un desgarro.
En los primeros minutos los colombianos, empujados por más de 40 mil personas, se fueron con todo a buscar la victoria. Y al minuto de juego casi consiguen abrir el marcador, con un cabezazo de Blas Pérez, que de manera notable envió al corner Mauricio Caranta.
Después de esa chance los colombianos siguieron apretando a Boca contra su área, que sufrió esos primeros minutos de juego porque los volantes del equipo de Miguel Russo no agarraban la pelota, Juan Román Riquelme no aparecía, seguramente contrariado por el mal estado del campo de juego.
Pero de a poco los argentinos se fueron afianzando y acostumbrado al mal estado del campo de juego, lograron que toda la euforia de los simpatizantes locales se fuera aplacando.
Y en la primera contra Rodrigo Palacio contestó y casi abre el marcador, con remate bajo desde el borde del área grande, que pasó a centímetros del palo derecho del arquero.
A partir de ahí lo de Cúcuta fue sólo empuje, sin claridad y sin profundidad, y con Boca agazapado para golpear.
Por eso no sorprendió que a los 27 minutos Palacio desbordara por derecha, para enviar un centro rasante y Pablo Ledesma, con el revés del pie derecho interceptó, a centímetros del arco, para marcar el primer tanto de la noche.
El gol dejó mudo a todo el estadio, que vivió las horas previas con una gran expectativa, y recién se levantaron diez minutos del después del gol, luego de que Caranta le sacara otro tanto cantado a Blas Pérez y en el rebote el recién ingresado Charles Córdoba estrelló la pelota en el palo derecho del arquero.
Cuando Boca dominaba, pese a alguna que otra situación de los locales, llegó el empate de Cúcuta y lo hizo el panameño Pérez, a quien Caranta le había ahogado el grito dos veces, pero esta vez el arquero xeneize no tuvo nada que hacer con el remate del delantero.
En el comienzo del segundo tiempo se notó que ambos equipos sintieron el intenso ritmo que le dieron a la etapa inicial, algo que de entrada favoreció a Boca, que con el tanto marcado en condición de visitante más volver a Buenos Aires sin perder comenzó a caerle más que bien.
Pero Boca se defendió demasiado cerca de su arco y lo pagó caro, primero Pérez, ante una mala salida de Bobadilla puso arriba a Cúcuta y después Bustos, de tiro libre puso cifras definitivas al marcador.
Fuente: Télam.