FÚTBOL | Los equipos de Ischia y Cagna jugarán en la cancha de Racing la final del triangular a partir de las 20.30 con el arbitraje de Pezzotta. Los xeneizes no podrán contar con Vargas ni con Riquelme, mientras que los de victoria irán con cuatro cambios respecto del partido ante San Lorenzo.
Boca Juniors y Tigre jugarán hoy el partido que definirá al campeón del torneo Apertura, sabiendo que al equipo de la ribera hasta perdiendo por un gol de diferencia le alcanzará para quedarse con el título.
El partido, que comenzará a las 20.30, se jugará en el estadio de Racing (Presidente Perón) y tendrá como árbitro a Sergio Pezzotta.
Boca para ser campeón tiene tres resultados, porque ganando, empatando o perdiendo por un gol de diferencia se quedará con el torneo Apertura.
Tigre, por su parte, necesita vencer al equipo de la ribera por dos goles de diferencia o más, porque cualquier otro resultado lo dejará sin el ansiado y soñado primer título en el fútbol grande de Argentina.
Luego de la victoria que consiguió Boca ante San Lorenzo por 3-1 el clima festivo se apoderó de todos en el conjunto xeneize, pero hoy Carlos Ischia le puso los puntos a sus dirigidos.
"Todavía no se ganó nada", les dijo el técnico a sus dirigidos, dejando claro que para ser campeón no se puede pasar por alto a Tigre, que por algo se encuentra en esta instancia.
También se debe tener en cuenta que Tigre superó en este certamen a Boca en las mismísima Bombonera (3-2) y nadie le puede sacar el sueño a los de Victoria de poder conseguir el resultado que le permite ser campeón hoy en la cancha de Racing.
Además, no es un tema menor que Ischia no pueda contar hoy con Juan Román Riquelme, quien ante San Lorenzo tocó muy poco la pelota, participó poco y nada del juego, pero estuvo presente en los tres goles de Boca.
En el primer tanto del xeneize Riquelme envió en forma perfecta el centro para la cabeza de Lucas Viatri, en el segundo gol con un toque magistral dejó solo a Rodrigo Palacio y en la tercera conquista inició la contra con un cambio de frente de 60 metros, en el que le puso el balón en los pies a Jesús Datolo.
Es decir, si en un partido en el que no tiene mucha presencia, Riquelme fue determinante no hay dudas que ausencia pesará y mucho, no así la del colombiano Fabián Vargas.
Es que Riquelme tiene muchas finales en su lomo, es el que le habla todo el partido al árbitro y el que aparece en los momentos necesarios, una cualidad que no tiene Leandro Gracián, uno de sus posibles reemplazantes.
Por el lado de Tigre ya está todo claro, porque Diego Cagna confirmó todo, con cuatro variantes, de las cuales dos son obligadas, debido a la expulsión del arquero Daniel Islas y a que el volante Diego Castaño llegó a las cinco amarillas, ambos en el encuentro del miércoles pasado ante San Lorenzo.
El arquero Luis Ardente reemplazará a Islas, mientras que el volante Jonathan Blanco ingresará por Castaño.
En tanto, Cagna dispuso dos modificaciones tácticas, que serán los ingresos del mediocampista Sebastián Rosano y el delantero Leandro Lázzaro, quienes reemplazarán Sebastián Rusculleda y Lionel Altobelli, respectivamente.
Entonces, está todo listo para la gran final del triangular del torneo Apertura, en el que San Lorenzo ya quedó sin chances, y sólo Boca y Tigre están en condiciones de gritar campeón y pasar una buena Navidad.
Fuente: Télam.