Boca venció a Central Córdoba por la Copa Argentina
FÚTBOL | Boca Juniors se clasificó anoche a los octavos de final de la Copa Argentina de fútbol, al vencer por 2 a 0 a Central Córdoba de Rosario, de la Primera C, en el estadio Bicentenario de San Juan.
Los goles del "Xeneize" fueron anotados por Nicolás Blandi, a los 41 minutos del primer tiempo, y Sergio Araujo, a los 22 del segundo.
El último enfrentamiento entre ambos equipos había sido el 23 de agosto de 1959, curiosamente con triunfo boquense por 2 a 0 con goles de Osvaldo Ángel Nardiello, el primero de tiro penal.
En la próxima instancia, en sede y fecha a designar, el equipo de Julio César Falcioni se cruzará con el ganador del choque que, el jueves 22 de marzo, protagonizarán Olimpo de Bahía Blanca (de Primera División) y Excursionistas (también de la C).
Las ganas, la motivación natural de enfrentarse con Boca, le dieron a Central Córdoba la posibilidad de llegar dos veces con peligro cierto en el inicio del partido, ambas cabezazos de Marcos Figueroa tras sendos centros de Juan Carlos Lescano.
Pero el equipo alternativo que presentó Boca de a poco se fue acomodando en la cancha y el choque se hizo más parejo. El equilibrio, eso sí, se tradujo en un juego poco vistoso y casi sin situaciones de riesgo frente a los arcos de Sosa y Leguizamón.
La diferencia de jerarquía y el oficio, aun sin acumular mucho mérito, terminaron por inclinar la balanza en favor del equipo de La Ribera minutos antes del final del primer tiempo.
Fue a los 41 cuando Blandi recibió en el área un centro de Sánchez Miño, le ganó con el cuerpo a su marca y venció con justeza al arquero "charrúa".
Todo el segundo tiempo se le hizo cuesta arriba al conjunto de Omar Palma. Porque Boca, además, creció en su rendimiento a partir de sus individualidades más destacadas.
El "Pochi" Cristian Chávez se hizo más punzante y vertical, los de Falcioni ganaron desborde con Gaona Lugo y Fernández aportó dinámica en el ida y vuelta por su costado. A los rosarinos ya no les alcanzaba con el sacrificio desplegado en la etapa inicial. Que por cierto no era el mismo, por su cansancio notorio.
Boca, que venía del susto en la rueda previa ante Santamarina de Tandil -al que eliminó recién en la definición por penales-, se puso serio en el asedio, hizo valer la distancia física y técnica de sus hombres y llegó con claridad: Leguizamón tapó ante Araujo, primero, y Fernández estrelló luego un remate en el travesaño.
Y finalmente, en la insistencia, llegó el segundo, a los 22 de la etapa final, cuando Gaona Lugo desbordó por izquierda, envió el centro atrás y definió Araujo, con un remate fuerte que se desvió en un defensor y descolocó a Leguizamón. Fue el último golpe para el heroísmo con el que soñó el "Charrúa". Ganó Boca. Ganó la lógica.