FÚTBOL | El equipo argentino perdió 2 a 0, con dos goles de Alex. El partido fue claramente superior para los brasileños, más allá de eso los "xeneizes" estaban firmes en defensa. Hasta que llegaron los tantos de Alex, que cambiaron el libreto.
Los dos goles fueron convertidos en el segundo tiempo por el delantero Alex, a los 4 y 43 minutos. El desquite se jugará el 6 de noviembre próximo en La Bombonera y Boca deberá ganar por tres goles de diferencia para acceder a la siguiente fase.
El cotejo se jugó en el estadio Beira Río, y en el primer tiempo Boca, con un esquema de 5-3-1-1 no tuvo demasiados problemas para detener los embates del conjunto local.
Pero en el segundo periodo, a los 4 minutos, el delantero Alex, con un violento tiro tras una excelente jugada individual quebró la resistencia del arquero Javier García y estableció la ventaja para el Internacional.
El golpe letal llegó en las postrimerías del partido, a los 43 minutos, cuando otra vez Alex, esta vez de zurda, colocó la pelota fuera del alcance del arquero xeneize.
Los dos goles complicaron al equipo dirigido por Carlos Ischia, que había salido con un sistema cauteloso, mediante el cual logró contener al Inter en la primera etapa.
En ese período tuvo la posibilidad, dilapidada por el experimentado Luciano Figueroa -de flojísima labor- de convertir, cuando una perfecta habilitación de Neri Cardozo lo dejó sólo al ex Rosario Central y River con el arquero, pero éste se cayó y desperdició una inmejorable oportunidad para convertir.
El Internacional había llegado tibiamente, merced al despliegue- discontinuo- de Andrés D'Alessandro, quien habilitó en varias oportunidades al escurridizo Filmar, pero el atacante no logró disponer de una situación clara para marcar.
En el segundo período, apenas comenzó fue Alex el que quebró la igualdad con un violento derechazo y ahí comenzó a desmoronarse el planteo de Ischia, que pese a los cambios de Ricardo Noir -se fue expulsado por una fuerte infracción- por Figueroa y Nicolás Gaitán por Neri Cardozo no logró imponerse sobre el Inter.
Boca no llegó nunca al arco rival en el segundo tiempo y la tibieza de sus atacantes fue tan llamativa que ni siquiera lograron ejecutar un tiro directo hacia la valla defendida por Lauro.
El triunfo del equipo brasileño fue justo, ya que tuvo más profundidad a la hora de atacar y sobre el final, estuvo a punto de convertir el tercero que hubiera liquidado la serie.
