FÚTBOL | Newell’s lo venció por 1-0, con gol de Salcedo, en Rosario. Así dejó pasar la chance de quedar como único líder, tras la caída sufrida por Independiente. El equipo de Russo no jugó bien, volvió carecer de ideas y se repitió en centros. El miércoles había sido eliminado de la Copa Sudamericana.
Newell’s fue amplio dominador del primer tiempo. Sólido en defensa, rápido y luchador en el mediocampo, sólo le faltó mayor lucidez y una cierta dosis de fortuna para asegurarse el triunfo definitivo en esos primeros cuarenta y cinco minutos. Es que los locales dispusieron de tantas situaciones, que bien pudieron sacar una amplia diferencia sólo en el primer período del encuentro disputado en el Parque de la Independencia.
Pese a que Boca tenía la chance de quedar como único puntero, luego de la derrota del sábado de Independiente ante Banfield, los ‘xeneizes’ salieron “dormidos” a jugar en Rosario. Les costó demasiado imponer su juego y sólo avanzaron hasta el lugar que los locales le permitieron. Entonces, como no encontraba los caminos para inquietar a Villar, el equipo de Russo se repitió en centros -en la búsqueda de un cabezazo salvador de Palermo- casi como única arma ofensiva.
A los 12 minutos, Newell’s recibió el justo premio a su evidente superioridad sobre el campo: Lucero envió un centro desde la izquierda y el paraguayo Salcedo anticipó a los centrales de Boca, en el primer palo, para conectar un cabezazo cruzado que se metió en el ángulo opuesto del arco defendido por Caranta.
El conjunto rosarino pudo aumentar en numerosas oportunidades. A los 28 minutos, en una jugada calcada al gol, Lucero envió un nuevo centro desde la izquierda y Steinert convirtió también con un gran cabezazo. Pero el tanto fue anulado a instancias del juez de línea, por una milimétrica posición adelantada, muy bien sancionada.
A los 30 minutos, Caranta sacó al córner, luego de un centro de Ansaldi, que llevó bastante peligro al ser desviado por un delantero, cerca del palo izquierdo. Y un minuto más tarde, el arquero ‘xeneize’ se convirtió en gran figura, al taparle con sus pies un remate de Salcedo, desde el centro del área, después de una excelente combinación colectiva iniciada por Donnet y continuada por Ansaldi y Ré.
Boca recién reaccionó sobre el final, aunque jamás tuvo claridad. A los 34 minutos, Boselli marró una clara oportunidad bajo los palos, luego de un centro de Krupoviesa, al rematar por arriba del arco. A los 40 minutos, Justo Villar intervino por primera vez, ante un remate de Banega desde afuera del área. Demasiado poco para un aspirante al título...
Tan superado había sido Boca, que su técnico dispuso dos cambios en el mediocampo para el inicio del complemento: Battaglia y el uruguayo González, en reemplazo de Banega y Ledesma. Y sobre los 10 minutos, utilizó su última posibilidad de modificación e hizo ingresar al uruguayo Bueno, para quedar con tres delanteros en el campo.
Las modificaciones parecieron dar cierto resultado, porque los ‘xeneizes’ equilibraron el juego y comenzaron a llegar con peligro, aunque repitieron su receta de los centros al área. Al minuto, Palermo le ganó por primera vez a Schiavi y cabeceó a las manos de Villar; a los 5m. Cahais cabeceó luego de un córner y casi convierte; a los 7m. Neri Cardozo probó con un remate desde afuera y a los 8m. Palermo volvió a imponerse con su físico dentro del área y metió un cabezazo de pique al suelo, que salió junto al palo izquierdo.
Newell’s, que ya no dominaba como en el primer tiempo, apostaba a los contragolpes. Pudo aumentar a los 11m. con una gran media vuelta de Salcedo, que se fue junto al palo izquierdo y luego a los 17m., con un derechazo cruzado de Steinert, que salió por el mismo sector.
Hasta el final, Boca fue a la carga, con más voluntad que ideas, característica que viene siendo una constante en los últimos tiempos, como ocurrió en la fecha pasada ante Gimnasia de Jujuy (2-2) y el miércoles ante el San Pablo (1-0), en Brasil. Queda claro que, más allá de la incorporación de Gracián, la ausencia de Riquelme no fue reemplazada aún en el esquema de Miguel Russo.
Para Newell’s, el triunfo significa un importante avance para incrementar su promedio contra el descenso y, como bien dice el viejo refrán ‘futbolero’: técnico que debuta, gana. Caruso Lombardi volvió a festejar contra Boca, como ya había sucedido en la segunda fecha del presente Apertura, cuando el DT estaba al frente de Argentinos Juniors (3-2, en La Paternal).
Fuente: Télam.