FÚTBOL | La Selección tuvo una clara chance en el primer tiempo, cuando Tevez malogró un penal. También fallaron Messi y Gago en dos situaciones netas. A los 26 minutos de la etapa final, abrió el marcador Ayoví, y a los 38 minutos Palacios selló el triunfo de los locales.
El seleccionado argentino de fútbol perdió 2 a 0 con Ecuador, en la altura de Quito, en un partido cuyo resultado bien pudo haber sido otro, pero el local fue el que acertó en este encuentro correspondiente a la 14ta fecha de la eliminatoria sudamericana.
Los goles de Ecuador los señalaron Walter Ayoví y Pablo Palacios, ambos en la segunda etapa. En el primer tiempo Carlos Tevez erró un penal.
El partido se jugó en el estadio Olímpico Atahualpa, de Quito, con un buen arbitraje del chileno Carlos Chandía.
Argentina, pese a perder, dejó una mejor imagen que contra Colombia, pero no aguantó el ritmo en el segundo tiempo y por eso perdió.
El día para Argentina, pensando que debía jugar en la altura no podía arrancar peor, porque Quito amaneció a pleno sol, con más de 25 grados de temperatura y eso es claramente perjudicial estando a 2.800 metros por sobre el nivel del mar.
Pero todos sonrieron cuando llegadas las 14, hora local, dos horas antes del comienzo del partido, el cielo se nubló, pero luego llovió, provocando un campo pesado y más el de estadio Olímpico Atahualpa, que mostraba un césped bien alto, cosa de sacar más rápido piernas.
Y a los 30 segundos del comienzo del partido, con la cancha rápida, Felipe Caicedo aprovechó un error compartido entre Martín Demichelis y Gabriel Heinze, pero Nicolás Otamendi lo tapó justo cuando remataba en forma franca al arco.
Como se esperaba Ecuador salió con todo, buscando marcar rápido un gol, pero los dirigidos por Diego Maradona se mostraron tranquilos, al punto que a los 4 minutos Carlos Tevez tuvo una chance clara de gol, luego de una asistencia de Lionel Messi, pero salvó el arquero Marcelo Elizaga.
Con el correr de los minutos el asedio de Ecuador cesó y de a poco los de celeste y blanco se animaron a más, sobre todo cuando la pelota pasaba por los pies de Messi.
Tanto fue así, que a los 11 minutos tuvo el delantero de Barcelona de España la apertura del marcador, luego de un buen centro rasante de Gabriel Messi, pero exigido Messi punteó la pelota fuera del arco.
Dentro de un primer tiempo equilibrado, con un dominio territorial de los ecuatorianos, la sensación en la cancha era que Messi en cualquier momento podría marcar diferencia, porque quedaba en todas los contraataques mano a mano en defensa y por lo general ganaba.
Los dirigidos por Sixto Vizuete sintieron la salida por lesión de Carlos Tenorio -lo reemplazó Montero- y sólo Caicedo o algún remate al arco de los laterales inquietaban en algo a Mariano Andújar.
La lluvia, la seguridad de Otamendi en el fondo, el criterio de Fernando Gago en el medio y lo encendido que se mostraba Messi generaron que se aplacara todo el estadio.
Argentina, cuidando la pelota era más que Ecuador y tuvo su gran chance en la etapa inicial, porque Messi lo dejó solo a Tevez con el arquero, quien le cometió un claro penal al delantero, bien sancionado por el chileno Chandía.
Pero Tevez remató liviano, al palo izquierdo de Elizaga, quien dejó rebote pero Messi no lo pudo aprovechar.
Esa situación levantó a los ecuatorianos, que empujaron en lo que quedó del primer tiempo pero no generaron peligro, mientras que Messi, la figura de los 45 minutos iniciales, cada vez que pudo encaró y complicó a todo el fondo rival.
En el segundo tiempo pasó lo mismo que en el primero, con Ecuador yendo, buscando, generando peligros con centros y remates de larga distancia y Argentina con Messi estando siempre cerca de abrir el marcador.
La marca endeble del fondo de Ecuadir fue una invitación para el ataque argentino, que antes de los cinco minutos se pudo poner en ventaja, pero Gago desde el punto del penal le acertó al arquero Elizaga, a esa altura, el mejor del local.
A medida que pasaban los minutos la desesperación de apoderaba de todos en Quito y más cuando en los pocos remates que iban al arco eran bien controlados por Andújar.
Pero el partido se abrió para los ecuatorianos con un gol de otra eliminatoria, marcado con un tremendo remate de Ayoví, que se metió por el ángulo izquierdo de Andújar.
Ahí se terminó el partido para el seleccionado argentino, que en la altura había hecho bien las cosas, pero es muy difícil jugar en este tipo de lugares.
El segundo gol de Ecuador, marcado por Palacios, luego de una serie de rebotes en el área, coronó un resultado que pudo haber sido otro, pero a veces se necesita una dosis de suerte y, sobre todo, estar aclimatado para jugar a 2.800 metros de altura.
Fuente: Télam.