All Boys casi se aseguró la permanencia al ganarle a Quilmes

Con el éxito alcanzado, el conjunto de Floresta llegó a las 48 unidades en la sumatoria de la tabla general (que también incluye el Apertura 2010) y se ubicó a las puertas de la salvación, inclusive de la Promoción. Por el contrario, Quilmes, con 35 puntos en esa misma tabla, quedó muy comprometido en lo que respecta a la permanencia en Primera: debería ganar los tres partidos que le quedan (Boca, San Lorenzo y Olimpo) y esperar que los resultados que obtengan Gimnasia y Huracán le posibiliten jugar la Promoción. El ingresado Agustín Torassa, a los 44 minutos del segundo tiempo, con una pirueta en el área, tras un centro que bajó Mauro Matos le permitió al conjunto de José Romero llevarse un triunfo que adquiere mayor valor que merecimientos, a partir de lo hecho por uno y otro dentro del campo de juego. El partido fue parejo y trabado. Dentro de esa tónica, el primer tiempo pasó prácticamente inadvertido, con nulas aproximaciones a las vallas rivales y jugadores que corrían y ocupaban espacios, aunque no le daban circulación prolija a la pelota. En ese contexto, el "Cervecero", tal vez por la incómoda situación en la tabla, se mostró ligeramente más ambicioso, aunque no tuvo profundidad como para inquietar a una firme defensa "alba", en donde nuevamente sobresalió el triángulo que conforman el arquero Nicolás Cambiasso y los zagueros Carlos Casteglione y Eduardo Domínguez. En la segunda mitad, los dirigidos por Ricardo Caruso Lombardi se adelantaron en el terreno, apelaron a una mejor labor de Francisco Cerro y empezaron a prevalecer en la zona central. De este modo generaron mayor peligro. Apenas comenzada la segunda parte, el citado Cerro exigió una atajada muy buena de Cambiasso, que mandó la pelota al corner, mientras que el "1" local se vistió de héroe también, cuando rechazó con los pies un centro cruzado de Claudio Corvalán. Y cuando Cambiasso no pudo resolver contó con el "beneficio" de los fallos arbitrales de Gabriel Favale quien, por ejemplo, invalidó una maniobra que terminó con un gol "cervecero", cuando cobró foul de Pablo Vázquez sobre el guardavallas local. La entrada de Sebastián Grazzini (por un inexpresivo y abúlico Ariel Ortega, quien se retiró silbado por el público local) le dio algo más de fluidez al traslado del once local y, de hecho, el rosarino tuvo la chance más nítida para abrir la pizarra, con un remate bajo que fue atajado por Emanuel Trípodi. El empate parecía cosa juzgada. Hasta que a los 44 minutos, Matos bajó una pelota en el área y Torassa, quien había reemplazado a Sebastián Ereros, le ganó a su marcador en el área y metió un disparo inatajable para decretar la locura en Floresta. Fuente: Télam.