Alemania ganó aunque dejó entrever problemas defensivos
| En la inauguración del Mundial, los locales lograron sumar tres puntos vitales en la lucha por clasificar a la siguiente fase. Si bien metieron cuatro goles, las desinteligencias en la última línea les causaron más de un dolor de cabeza
En el encuentro inaugural de la Copa del Mundo Alemania '06, el país anfitrión cosechó una victoria importante para la clasificación a la siguiente fase.
Si bien los alemanes ganaron por 4 a 2, dejaron entrever falencias defensivas que fueron aprovechadas por Costa Rica, un equipo que sin atacar complicó bastante.
La primera emoción de la tarde de Munich llegó a los 6 minutos de juego: Lahm tomó el esférico en la puerta del área, enganchó para adentro y -tras dejar de lado a un rival- sacó un taponazo que se coló en el ángulo del arco defendido por Porras. Era el prematuro 1 a 0 para los locales y la gente se ilusionaba con un triunfo tranquilo.
Para sorpresa de varios, Costa Rica no se dio por vencida y decidió atacar. Por tal motivo, rápidamente igualó las acciones cuando Wanchope quedó mano a mano con el arquero -luego de un mal achique de los alemanes- y no titubeó a la hora de anotar.
Sólo cinco minutos más tarde, Scwensteiger mandó el centro y Klose -libre de marcas- estableció el 2 a 1 parcial. Con la ventaja, el conjunto anfitrión se retiró al vestuario con la tranquilidad que ofrece ir ganando el match, pero sabiendo que tenía que reordenarse en el fondo.
En el inicio del complemento, Costa Rica no salió a buscar el balón y dejaba que su rival manejase los hilos del encuentro. Por su parte, los conducidos tácticamente por Klinsmann continuaron yendo al ataque con Schweinsteiger, Frings, Schneider y Podolski.
Promediando el segundo periodo, los locales se encontraron con el 3 a 1: Lahm mandó el centro, Klose cabeceó, Porras tapó y en rebote nuevamente el "11" volvió a marcar.
Para preocupación de toda Alemania, los errores defensivos se hicieron presentes una vez más. Un centro cayó en el área, la defensa se equivocó con el achique y Wanchope anotó nuevamente su nombre en las estadísticas.
Sobre la agonía del encuentro, los dirigidos por Klinsmann sellaron el 4 a 2 definitivo. Frings se apoderó del esférico a 30 metros del arco y sacó un bombazo que se clavó en el ángulo del arco defendido por Porras, desatando la alegría y algarabía del pueblo germano.
Fuente: agencia Nova.