Domingo 15 de Mayo de 2022, 12:41

"Tenemos que escuchar todas las voces y que la Justicia actúe"

Judiciales | Mario Arcusín, uno de los abogados con mayor experiencia en el derecho penal en Entre Ríos, y junto Fabián Otarán, realizan la defensa técnica del Presidente Municipal de Gilbert. La hipótesis de los abogados de Fabián Constantino se centra en un escenario de relaciones amistosas, consentidas, una trama política de mezquindades y celos de pareja.


Los doctores Mario Arcusín y Fabián Otarán están a cargo de la defensa técnica de Ángel Fabián Constantino, el Presidente Municipal de Gilbert que fue denunciado por presunto abuso sexual con acceso carnal y acoso laboral. La hipótesis de los abogados se centra en un escenario de relaciones amistosas, consentidas, una trama política de mezquindades y celos de pareja.

 “Tenemos que escuchar todas las voces y que la Justicia actúe”, sostuvo Arcusín y adelantó que pedirá el sobreseimiento.

“La segunda salida es aceptar que se pudo haber cometido algún delito y evitar un juicio oral, entonces podríamos ir a un juicio abreviado por el mínimo de la pena. Y la tercera opción es ir a un juicio oral ante un Tribunal, si la pena máxima es menor a 20 años. El juicio oral sería si la pena pedida excede los 20 años”, explicó el letrado.

La causa Constantino se encuentra actualmente en la investigación Penal Preparatoria (IPP), es decir que hasta ahora la causa no se ha elevado a juicio.

Consultado al defensor sobre las pruebas con las que cuenta la Justicia contra Constantino, éste detalló: “Las pericias psicológicas tienen muchas fallas; porque la pericia puede demostrar la realidad que la persona ha sufrido algún tipo de daño de este tipo, pero no puede probar quién es el autor, ese es el problema. Sino, uno puede estar traspolando una situación que le ocurrió con otra persona y la traspola a otra persona que tiene mayor licencia pública como en el caso de Constantino”.

“Las tres pericias tienen semejanzas muy raras. Es muy extraño que en tres pericias a mujeres distintas (por más que sean del mismo pueblo) porque son de distinta edad y extracción social… todo esto hace suponer que no van a ser idénticas, pero son casi idénticas, como si se hubiera tomado un modelo, apuntó Arcusín.

Para el defensor, “estos delitos se llaman de oscuridad o de silencio porque es muy difícil que haya testigos, excepto que alguien deje un teléfono grabando. Esto hace que las pruebas se reduzcan muchísimo”.

“No puede estar Juancito debajo de la cama viendo qué es lo que pasó. Entonces, la prueba principal que maneja Fiscalía son las pericias psicológicas y la declaración de las supuestas víctimas”, comentó.

En relación a la hipótesis que manejan desde la defensa, el letrado aseguró estar convencido de “que a Constantino le hicieron una cama, y esto no quiere decir que no haya habido una relación”.

“En una de sus declaraciones como imputado él reconoce haber tenido relaciones con una de las tres denunciantes, pero son personas mayores”, fundamentó. Y continuó: “según el Derecho Penal argentino, todas las relaciones con menores de 15 años son abusos con acceso carnal; desde los 15 a los 18 se llama estupro y ahí no se puede alegar ningún tipo de consentimiento, porque se supone que una menor de 18 años no tiene conciencia, aunque ahora ya sabemos que una de 12 tiene más conciencia que yo que tengo 66 (sic). Entonces, se suponía que una menor de 18 años no entendía lo que estaba haciendo; o le parecía un juego. Entonces, si un mayor se aprovechaba de eso, cometía un delito”.

Al interrogarlo a Arcusín por qué denunciarían al Intendente sí, como él sostiene, la relación fue consentida, éste argumentó: “suele suceder que del amor al odio hay un paso muy cercano. Si llegamos a probar que hay relaciones que no existieron y que otra fue consensuada, o que la otra no pasó de ser un simple cariño, no tenemos que probar nada más que eso, porque las relaciones amorosas no tienen por qué probarse”.

“Yo estoy divorciado y tengo libertad de estar con quién quiera, siempre que sea mayor y ambos estemos de acuerdo. Antes existía el adulterio dentro del matrimonio, hoy ya no existe”, ejemplificó.

“Antes estas leyes eran peor para las mujeres, pero ahora, en vez de emparejarnos, nos hemos ido para el otro lado. Lo digo porque soy el abogado de Entre Ríos que más experiencia tiene en delitos sexuales. Y es evidente que ahora se invierte, porque el principio de inocencia y el derecho de defensa se revierten; y en vez de tener que probar la mujer si es cierto lo que dice; el hombre tiene que probar que no es cierto lo que dice”, expuso el letrado.

“Yo voy a probar que las relaciones fueron consentidas, y tengo pruebas”, insistió el defensor del intendente al comentar que, en caso de ir a juicio oral por abuso sexual “se evaluará si le tocó la cola o le tocó los pechos, y eso deberá probarse”.

Al mostrarse en contra de que sólo se escuche la palabra de las víctimas, Arcusín argumentó por qué, según su entender, Constantino tiene “atractivo sobre las mujeres”.

“Una cosa es que sea mujeriego y que tenga atractivo sobre las mujeres por su formación, -porque en un pueblo chico, salvo un médico y algún odontólogo- todos tienen el secundario. Los chicos emigran cuando terminan la escuela y no hay profesionales. Constantino tiene un título de Psicología Social, fue durante muchos años Director de Cultura. Es una persona que siempre tuvo auto; convengamos que hay cierto tipo de hombres que tiene un atractivo sobre las mujeres; así como hay ciertas mujeres que tienen atractivo sobre los hombres. Pero eso no está en el Código Penal”, desplegó el abogado.

“No me refiero al poder que le otorga su cargo de presidente municipal, sino al poder que le otorgan sus características y estoy hablando casi en primera persona: Por ejemplo, yo estoy divorciado y soy consciente que mi presencia física… soy una persona de 1.90 metros, tengo un auto nuevo, tengo una casa grande, soy muy conocido; es decir, tengo un atractivo que no lo puedo negar. Reconozco que habemos ciertas personas que tenemos algunas que tenemos algunas características que nos hacen más atractivos. Pero esto no está penado en el Código Penal”, aclaró.

“Que él sea Presidente Municipal, ya de por sí, le da un tinte político. Pero, en la previa fue notorio que hubo internas y que hubo ciertas decisiones para una inversión de fórmula. En algún momento anterior a las PASO se proponía una inversión; es decir, que Meneses fuese Intendente y Constantino sea Vice. Obviamente, que una persona inteligente y conocedora de la política argentina puede pensar que puede haber motivaciones políticas y que quieran bajar a Constantino. Como no lo pueden bajar políticamente porque tiene un buen sustento, pretenden bajarlo así. Es una hipótesis. No estoy asegurando nada…pero también se puede pensar que hay celos. Hay un montón de causales que pueden haber llevado a que se arme una escena inexistente”, relató Arcusín. Además, sumó que otra hipótesis puede ser la de los celos. “esamos hablando de tres mujeres. Puede haber celos masculinos porque estas mujeres tenían parejas”, dijo.

“El pedido de licencia suma a la hipótesis del factor político: ¿Por qué a (Sergio) Urribarri no le pidieron nunca que se tome licencia como Embajador de Israel? ¿Por qué a (José) Alperovich -que fue denunciado hace tres años por su sobrina por violación- recién en diciembre pasado quedó sin fueros porque terminó su cargo como Senador? Nunca le sacaron los fueros; entonces, que alguien me explique por qué a Urribarri nadie le hizo una nota desde el PJ, o Guillermina Guastavino no hizo ninguna nota al Partido Justicialista como la que hizo para Constantino, o contra Alperovich, si estamos hablando sólo de delitos sexuales”, planteó Arcusin.

Fuente: Diario El Día.