Judiciales | En un nuevo capítulo de la disputa por la expropiación de la petrolera, la Juez Loretta Preska ordenó al país entregar comunicaciones de WhatsApp de funcionarios. Argentina busca frenar la ejecución del fallo para evitar la entrega de acciones de YPF.
La batalla judicial por la expropiación de YPF sumó este martes un nuevo episodio de alta tensión en los tribunales de Nueva York.
Mientras los representantes legales de Argentina presentaban argumentos ante la Corte de Apelaciones para evitar la ejecución de un fallo adverso, la Juez Federal Loretta Preska ordenó al país entregar el contenido de las comunicaciones de WhatsApp de funcionarios y exfuncionarios clave, incluidos el actual Ministro de Economía, Luis Caputo, y su antecesor, Sergio Massa.
Según informó Noticias Argentinas, la orden judicial fue emitida en el marco del juicio iniciado por el fondo Burford Capital, que reclama una millonaria indemnización por la estatización de la petrolera ocurrida en 2012.
La Juez Preska ya había fallado en contra de la Argentina y ahora insiste en avanzar con medidas que el Gobierno considera “invasivas y perjudiciales”.
En su presentación ante la Cámara de Apelaciones, el Estado argentino solicitó mantener la suspensión del fallo de Preska, argumentando que su ejecución “causaría un daño irreparable a la República” y “podría desatar un conflicto diplomático significativo con los Estados Unidos”.
El escrito, citado por el especialista Sebastián Maril, advierte que la decisión judicial “vulnera la inmunidad de ejecución que protege los bienes de un Estado extranjero” y contradice principios del derecho estadounidense, ya que las acciones de YPF se encuentran físicamente en territorio argentino.
El Gobierno también planteó que mantener la suspensión del fallo va en línea con el interés público, ya que ejecutar la sentencia no solo afectaría a YPF y a sus accionistas, sino también a toda la ciudadanía argentina, al comprometer un activo estratégico para el desarrollo energético del país.
La Corte de Apelaciones deberá resolver en los próximos días si accede al pedido argentino de suspender la orden de Preska mientras dure el proceso de apelación, o si permite avanzar con el cumplimiento de la sentencia que podría derivar en la entrega del control accionario de la petrolera.
Fuente: NA.
