Martes 26 de Abril de 2022, 06:38

Bordet profundiza el intercambio tecnológico con Israel

Política y Economía | El Gobernador, Gustavo Bordet, se reunió con autoridades del gobierno de Israel y visitó la empresa estatal de agua de ese país, Mekorot. Destacó la importancia de profundizar el intercambio tecnológico para aplicar en los sistemas productivos entrerrianos y profundizar el comercio bilateral.


Durante el segundo día de trabajo, en el marco de la misión institucional que el gobernador integra junto a seis mandatarios, autoridades de otras provincias, los Ministros del Interior, Eduardo de Pedro, de Agricultura, Julián Domínguez y de Ciencia y Tecnología, Daniel Filmus, junto al secretario General del Consejo Federal de Inversiones (CFI), Ignacio Lamothe.

La comitiva se reunió con el Viceprimer Ministro israelí, Gideon Saar, con el presidente de la Cámara de Comercio Israel-Golfo Pérsico, Enrique Cymerman, y visitaron las plantas Eshkol, de Mekorot, el proyecto Menashe y la empresa Watergen.

“Esta misión ha superado ampliamente las expectativas que teníamos cuando partimos. Mantenemos una agenda intensa que nos ha posibilitado tener reuniones con funcionarios de primera línea, con empresas y también por otro lado establecer vínculos para facilitar el comercio bilateral de Entre Ríos con el Estado de Israel”, destacó el mandatario al finalizar la jornada.

Además, explicó que el objetivo de la agenda de trabajo tiene que ver con “generar oportunidades para nuestras regiones”, a través del “intercambio técnico y científico que apunta a favorecer nuestro sistema de producción” y, por otro lado, “optimizar el cuidado responsable del agua”.

Luego de poner en valor los “lazos de cooperación que existen entre la Provincia de Entre Ríos y el Estado de Israel”, Bordet puntualizó que la provincia “exporta productos como fruta fresca, carnes vacunas con cortes kosher”.

Tras ello, precisó que uno de sus objetivos apuntaba a la producción de arándanos “que lleva 100 por ciento riego”. Para eso se propuso “encontrar métodos de riego por goteo de primera línea que se producen en Israel, y así mejorar la estructura de costos para que los productores entrerrianos puedan tener mayor competitividad”.

“Por otro lado, para la citricultura, la producción de cítricos dulces. Son muy pocas las fincas que tienen riego artificial y, en la medida en que pueda incrementarse la superficie de riego por goteo, se podrá cuadriplicar la producción por metro cuadrado. Además se obtiene una fruta de mejor calibre”, agregó el mandatario.

“Estos dos objetivos, cuando retorne a Argentina, estaremos conversándolos en las reuniones que habitualmente tenemos con la asociación de productores de cítricos y con la asociación de productores de arándanos”, adelantó el mandatario.

La delegación argentina recorrió la planta “Eshkol” de Mekorot, única de su tipo en Israel y la cuarta más grande del mundo, con el objetivo de conocer cómo opera en forma diaria para mejorar la calidad del agua. La planta filtra el agua bombeada del lago Kinneret que luego es distribuida por el Transportista Nacional de Agua a un tercio de la población de Israel.

Luego, en Ramat Yishai mantuvieron un encuentro con Enrique Cymerman, Presidente de la Cámara de Comercio Israel-Golfo Pérsico, donde se presentaron oportunidades de negocio e inversión en Argentina.

Entre las actividades, también visitaron el Proyecto “Menashe”, una planta que recoge en un canal de desvío compartido las aguas de inundación que fluyen en los arroyos que descienden de Ramat Menashe y del río Mishmarot que lo atraviesa, y luego corre hacia un depósito desde el cual se bombea el agua de acuerdo a las necesidades locales y las políticas nacionales de consumo.

Además, estuvieron en la empresa "Watergen", que opera a nivel global con el objetivo de producir agua del aire de forma independiente y autónoma. Dicha compañía fue elegida entre las 50 más innovadoras del mundo.

Israel ha estado a la vanguardia de la tecnología del agua desarrollando algunas de las soluciones más poderosas del planeta.

La misión financiada por el CFI es una apuesta a la transferencia de conocimiento a partir de la experiencia de Israel en la gestión del agua y en cómo se convirtió en una potencia hídrica organizándose institucionalmente para administrar el recurso de forma inteligente.