Automovilismo | El Procar 1100 disputó el fin de semana, en el Autódromo de Concepción del Uruguay, una doble jornada, con un notable crecimiento y paridad de máquinas. Gabriel Alfaro fue protagonista, siendo escolta en la Final #3 y ganador de la Final #4.
El evento, marcado por el regreso del público, con todos los cuidados pertinentes y una cantidad limitada de expectadores, nuevamente contó con un basavilbasense, Gabriel Alfaro, como animador. Arrancó la jornada del sábado marcando el ritmo, en el "JL Motorsport" se respiraba optimismo, y celebraban que en las tribunas había vecinos de “Basso” que fueron para alentar a “Chiquito”.
Las cosas en la Final #3 no resultaron todo lo que pretendía el equipo local, no obstante el 2do. escalón del podio no fue una "mala nota". Claramente la mayoría de los equipos hizo los deberes y acortó distancia con los que siempre marcaban el ritmo, Gabriel Alfaro; Diego Cabandié y Cristian Conte.
La marcha fue más pareja, todo más "apretado", y así fue que Cabandié relegó a "Chiquito" y Alejandro Cisneros se quedaría con el tercer peldaño del podio. Fue una carrera muy entretenida, "un espectáculo", según el propio Alfaro que destacó que hubo un cambio permanente de posiciones con sobrepaso, lo que claramente hizo "sufrir" a los que estaban en boxes y vibrar a los que alentaban desde las gradas.
Para la Final #4 casi no hubo que hacer ajustes y el equipo "JL Motorsport" aguardó confiado. Desde la partida las 20 máquinas volvieron a dar un enorme espectáculo; Diego Cabandié no pudo mover adelante pese a largar primero, el de "Basso" se adueño de la "fila india" que recorrería la primera vuelta y hasta que Cabandié diera el "golpe" y lo pasara, se le distanciara un poco y por detrás se le acercara Cristian Conte.
Pero "Chiquito", que era una locomotora, no solo acortó la distancia sino que sobrepasó Cabandié, que claramente tenía en la curva dos un radio de giro mejor, que le permitía recuperar la posición.
Esa historia se repetiría por un par de vueltas más, hasta la quinta que entró el Auto de Seguridad, por el peligro que representaba la manera en que había quedado el auto de Nicolás Galvarini.
Tras el relanzamiento Conte tomó la punta con Alfaro de escolta y Cisneros y Marcos Acosta como perseguidores y Cabandié, que pocos metros después sedería ante Luciano Demarlengue.
A tres giros del final habría más emociones. Conte mandaba y Alfaro era su escolta, pero también por momentos el basavilbasense se adueñaba del liderazgo. Así llegaron a la última vuelta, donde la "locomotora" de "Basso" fue imparable y llegó a la bandera a cuadros adelante.
Fue un carrerón, para el infarto, que felizmente terminó en manos del piloto local.
