Boca es finalista de la Copa Argentina

El equipo que dirige Julio César Falcioni, cuyo gol lo anotó Juan Román Riquelme con un exquisito tiro libre, a los 57 minutos, mientras que Alejandro Fiedrich marcó el empate, a los 89. De esta forma, Boca, que sigue firme en su objetivo de conseguir la Triple Corona (Clausura, Copa Libertadores y Copa Argentina) jugará el partido definitorio ante el ganador del duelo entre Racing Club y River Plate, que juegan en Salta. Boca dominó ampliamente las acciones en los primeros 20 minutos, se hizo dueño de la pelota, copó el mediocampo y se apoderó del terreno pero careció de profundidad. Riquelme, como siempre, fue la guía del equipo, el encargado de manejar y distribuir el juego que por lo general se dirigía hacia las bandas para que Cristian Chávez o Juan Sánchez Miño enviaran centros al área que eran neutralizados sin muchos problemas por la defensa de Deportivo Merlo. Luego, Boca bajó la intensidad y el equipo de Parque San Martín lo aprovechó, se adelantó en el campo de juego, comenzó a manejar un poco más la pelota y el partido se emparejó. Allí, comenzaron a aparecer los espacios y las jugadas de peligro. A los 21 minutos, Alejandro Fiedrich tomó la pelota en el mediocampo, eludió a dos rivales y le dio de zurda desde afuera del área y la pelota pasó por arriba del travesaño. La primera clara de Boca fue a los 30 minutos, cuando Darío Cvitanich le devolvió una pared a Santiago Silva que sin mucho ángulo le dio de derecha y la pelota fue a las manos de Darío Capogrosso. Seis minutos más tarde, Riquelme se la abrió a Chávez por derecha, envió el centro que cabeceó exigido Cvitanich y la pelota pasó por al lado del palo derecho de Sebastián Sosa. Para el final quedó un zurdazo de Walter Erviti que pasó cerca del palo derecho de Capogrosso. En la segunda parte, al minuto de juego Riquelme envió un centro desde la derecha que Silva peinó y la pelota le quedó a Matías Caruzzo que le dio de zurda y Capogrosso salvó casi milagrosamente. En la siguiente llegó la apertura del marcador a partir de un tiro libre de Riquelme que le pegó de derecha, con comba, y la pelota terminó en el ángulo derecho de Capogrosso. Con la ventaja, Boca utilizó todo su oficio para sostener el resultado y pudo aumentar el marcador primero con un cabezazo de Pablo Mouche que salvó bien Capogrosso y después con un derechazo de Crisitan Chávez que pasó cerca. Pero sobre el final empezó a flaquear. Cuando faltaban tres minutos, Deportivo Merlo lo tuvo con un zurdazo de Nahuel Yeri que se fue por arriba del travesaño. Y en la última, Friedrich tomó una pelota afuera del área, le dio de derecha y la pelota se metió en el palo izquierdo de Sosa, que reaccionó tarde, para marcar la igualdad. En la definición por penales, el uruguayo Sosa se volvió a convertir en la figura, como ante Olimpo de Bahía Blanca, en los octavos de final, y Rosario Central, en los cuartos, le atajó el cuarto disparo a Friedrich y Boca, que convirtió los cinco, se quedó con el pase a la final. De esta manera, Boca sumó su cuarta victoria desde los doce pasos en cinco encuentros disputados. Tres de esos triunfos, ante equipos del ascenso: en los 32avos de final derrotó 4-3 a Santamarina de Tandil, del Torneo Argentino A. En la siguiente ronda no tuvo inconvenientes ante Central Córdoba, de la Primera C, y lo venció 2-0. En los octavos, volvió a recurrir a la definición por penales. Fue ante Olimpo, recientemente descendido al Nacional B, a quien superó 11-10 en una maratónica tanda desde los doce pasos. En cuartos de final, Boca se midió ante Rosario Central, de la B Nacional, y fue más efectivo en la definición. Ganó 4-2 y se aseguró un lugar entres los cuatro mejores. Como sea, el equipo de la Ribera no detiene su marcha hacia el gran objetivo que es ganar todo lo que juega. Por ahora, en la Copa Argentina, cumplió con la premisa de llegar a la final.