Argentina goleó a Chile en el comienzo de las Eliminatorias

El seleccionado argentino de fútbol debutó con una buena goleada en las Eliminatorias para el Mundial de Brasil 2014, al vencer a Chile por 4 a 1, en un encuentro desarrollado en el estadio Monumental de River Plate. Gonzalo Higuaín, en tres oportunidades, y Lionel Messi, después de 16 partidos oficiales sin hacerlo (dos años y medio), anotaron los goles del equipo de Alejandro Sabella; Matías Fernández, por su parte, descontó para los del argentino Claudio Borghi. De esta manera Argentina se puso al frente de la tabla en esta fecha inaugural y va con confianza hacia su segundo compromiso, el martes que viene, de visitante ante Venezuela en Puerto La Cruz. Argentina resolvió rápido las ansiedades. A los siete minutos, exactamente, y de contragolpe, cuando luego de un tiro libre de Waldo Ponce que se estrelló en la barrera Di María se fue por la izquierda, metió un cambio de frente delicioso y Gonzalo Higuaín, entrando al área como "8", la bajó en un gesto técnico brillante y definió ante la salida de Claudio Bravo. Golazo. La jugada resumió las intenciones de Sabella para su equipo: simpleza y eficacia (igual que José Mourinho en el Real Madrid, a cuento de que los protagonistas de la acción fueron, justamente, hombres del equipo español). Pero el gol fue, en el sentido del dominio, contraproducente, porque Chile se quedó con la pelota. Los de Claudio Borghi probaron con centros aéreos, aspecto del juego en el que la Argentina mostró indecisiones, y también con un gran remate de Humberto Suazo, a los 21m, apenas desviado (el delantero recibió un tiro libre rápido de Valdivia, lo que también resumió las distracciones del fondo albiceleste). Pero Argentina sacó provecho de su poder de fuego a los 25m, otra vez de contragolpe: Higuaín fue ahora el de la asistencia y el del gol, por fin (¡por fin!), Lionel Messi, en diagonal de derecha al centro del área y con un preciso zurdazo al palo derecho de Bravo. El 2-0, exagerado, desnudó la inocencia del planteo chileno o mejor dicho de Borghi, siempre generoso con el espectáculo pero, a veces, a costa de su propia conveniencia: el eterno dilema entre intenciones y características de los jugadores para la ejecución (sumado a las notorias ausencias de Alexis Sánchez y Gary Medel). Entonces se soltó Messi, Higuaín y Di María siguieron en buen nivel y el conjunto de Sabella se acercó con mayor asiduidad hasta el arco de Bravo, pero sin llegar a generar peligro cierto. La "sociedad madrileña" Di María-Higuaín, cuando el inicio del segundo tiempo era de ida y vuelta, amplió la ventaja a los 6m (centro de Angel, zurdazo del "Pipita" dentro del área). Y aunque Andújar, a los 14m, con un pésimo despeje (con la complicidad de Burdisso y Zabaleta), permitió que Matías Fernández acortara las distancias, entre Messi e Higuaín pusieron, apenas tres minutos después, las cosas otra vez en su lugar: 4 a 1, con el tercero del delantero del Real tras pase del crack rosarino. Chile, cuya búsqueda fue declaración de principios y no necesidad ante la desventaja, siguió yendo al frente sin lograr otro descuento, pero sí desnudando las falencias defensivas del local. Que será de aquí en más el aspecto en el que con mayor énfasis deberá trabajar Sabella; del medio hacia adelante, esta noche, Messi, Higuaín y Di María, individual y asociadamente, proyectaron la esperanza de encontrar, al fin, un buen equipo. Fuente: Télam.